Cuando nos encontramos con un niño con rasgos autistas, tenemos que buscar al verdadero niño que está escondido detrás de ese cuerpo, de esa muralla. El medio es quien lo modifica, por lo tanto deberemos buscar el lugar o la puerta por donde entrar para empezar a caminar, para andar diferentes caminos junto a él. En este andar, es donde encontraremos la vía de ingreso que nos permitirá el encuentro con el interior del niño, dejando atrás aquella coraza que no nos dejaba verlo o encontrarlo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario